En un acto de solidaridad y determinación comunitaria, los residentes de San Caralampio se unieron para detener a presuntos delincuentes responsables del robo de las baterías de dos ambulancias pertenecientes al Grupo SAE en Tapachula, Chiapas.
El incidente tuvo lugar en las primeras horas del domingo pasado, cuando una banda compuesta por cuatro hombres y una mujer fue sorprendida in fraganti mientras perpetraba el acto delictivo.
La reacción de indignación no se hizo esperar, y la publicación del video del robo en redes sociales avivó el enojo tanto de los habitantes como de otras personas, quienes se movilizaron para dar con los responsables.
Dos de los implicados fueron entregados a las autoridades por los propios ciudadanos, mientras que los otros dos, tras recibir amenazas, revelaron el destino de las baterías robadas: un local de venta de tortas en el mercado San Juan, donde confesaron que el propietario las adquiría a bajo costo.
Determinados a hacer justicia por mano propia, un grupo de personas se dirigió al establecimiento y presionó al dueño, quien finalmente entregó las baterías de los vehículos.
El rápido desenlace de este episodio resalta la frustración de la comunidad ante la inseguridad y la impunidad, así como la necesidad de una acción conjunta entre sociedad y autoridades para combatir el crimen.
Asimismo, se señaló que el área de la Obrera, San Caralampio ha sido blanco frecuente de robos, con los delincuentes vendiendo los objetos sustraídos a precios reducidos en lugares como el mencionado local de tortas, lo que subraya la urgencia de una investigación exhaustiva por parte de las autoridades.
El local en cuestión, ubicado en la 13 calle Poniente entre 12 y 14 avenida Norte, a solo una cuadra del mercado San Juan, se encuentra bajo escrutinio, ya que se sospecha que podría albergar otros productos robados.




