Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Las 4 personas detenidas con droga fentanilo, armas y cartuchos fueron vinculados a proceso.
La Fiscalía General de la República (FGR), a través de la Fiscalía Especializada en materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), obtuvo vinculación a proceso en contra de 4 personas por su presunta responsabilidad en la comisión de los delitos de portación de arma de fuego, posesión de cartuchos y cargadores de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea, así como contra la salud en su modalidad de posesión con fines de comercio de fentanilo, cocaina y de marihuana.
La Ejecución de orden de cateo 197/2024, otorgada por el juez de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio del Centro de Justicia Penal Federal en el Estado de México, ingresaron al Rancho conocido como “El Manguito”, ubicado en Camino Abelardo L. Rodríguez, sin número visibl, Cintalapa de Figueroa, Chiapas.
Fue el pasado 05 de septiembre de 2024, donde las autoridades aseguraron 5 paquetes al parecer Cocaína y fentanilo, 4 armas largas, 4 cargadores, Dos ramas pequeñas de Marihuana, Bolsitas de plástico color azul tipo ziploc, 1 bascula gramera, 1 Chaleco antibalas, Diversa Documentación, 1 camioneta de la marca Chevrolet, tipo silverado doble cabina, con placas del Estado de México, cuenta con reporte de Robo
Ciudad de México, a 08 de septiembre del 2024
Mientras que en el cateo del “Rancho El suspiro”, se detuvo a Carlos Eduardo M. L. de 30 años de edad, Said L de 18 años de Edad, Tomás O. G de 62 años de edad y José Francisco X de 23 años de edad.
En este lugar se aseguraron 6 paquetes al parecer cocaina y fentanilo, 4 armas largas, una de ellas conocida como barret, Diversos cargadores, cartuchos de diferentes calibres, equipo tipo táctico, chalecos antibalas, una computador Lap top, 1 USB, 2 vehículos, una camioneta Frontier Color blanca, con placas del estado de Chiapas y una camioneta Ford Lobo de color negro con placas del estado de Chiapas, una placa de auto, Gorras y insignias con las leyendas CJNG y CCYG, además se aseguró provisionalmente el inmueble.
El Juez reclasifica el delito de portación por el de posesión y vincula a proceso a Carlos Eduardo M y José Francisco X por posesión de armas de uso exclusivo del Ejercito, además por la posesión de arma Barret y fusil, así como de los cartuchos para arma de fuego de uso exclusivo y por la posesión del narcótico con fines de comercio o venta por la confección que tenían los paquetes consistente en Fentanilo, atendiendo a lo establecido por el artículo 195, parrafo I en relación con el 193 y 194 del Código Penal Federal Vincula a proceso a Said L y a Tomás O., por la posesión de arma Barret y fusil, así como de los cartuchos para arma de fuego de uso exclusivo y por la posesión del narcótico con fines de comercio.
De acuerdo a las autoridades, este grupo CJNG se ha encargado de fabricar El fentanilo.
En México, la posesión, distribución y fabricación de fentanilo se consideran delitos graves debido a su alto potencial de abuso y los riesgos asociados con su consumo.
Las penas dependen de la cantidad de fentanilo que se posea y el tipo de actividad involucrada (consumo personal, distribución, tráfico, etc.).
Para uso personal, Si la cantidad incautada es mínima y se considera para consumo personal, el acusado puede recibir tratamientos médicos o rehabilitación en lugar de una pena de prisión. México reconoce que el uso de ciertas sustancias puede tratarse como un problema de salud.
Mientras que Tráfico o distribución: Si una persona es arrestada con grandes cantidades de fentanilo, o si se demuestra que participa en actividades de tráfico o distribución, las penas son mucho más severas.
La Ley General de Salud y el Código Penal Federal contemplan penas de hasta 10 a 25 años de prisión para delitos relacionados con el tráfico de drogas, incluidas las sustancias como el fentanilo.
Si el fentanilo se distribuye a menores o si la persona arrestada forma parte de un grupo delictivo organizado, las sanciones pueden incrementarse considerablemente.
El fentanilo es considerado una amenaza a nivel global debido a su letalidad, y los esfuerzos por combatir su tráfico en México han aumentado en los últimos años, lo que ha llevado a sanciones más estrictas en su regulación.